Muchas personas experimentan en algún momento de sus vidas el picor, la irritación y los resultados antiestéticos que pueden ser ocasionados por una infección en la piel. Pero lo que probablemente no sepan es lo comunes que pueden ser las infecciones por hongos. En este artículo hablaremos de los tipos de hongos que suelen afectar a la piel, sus causas, a qué hay que prestar atención y cómo tratarlos cuando aparecen. 

A todos nos gusta tener una piel sana pero, es posible llegar a sufrir de problemas como los hongos cutáneos. 

Los hongos en la piel pueden ser muy molestos y están causados por varios tipos de hongos que suelen encontrarse en zonas cálidas y húmedas. 

Conocer los diferentes tipos de hongos es una forma de estar preparado para prevenirlos o tratarlos si llegan a aparecer.

Tipos de hongos en la piel

Las infecciones cutáneas por hongos son bastante frecuentes y pueden ir desde problemas ligeramente irritantes a otros más graves que pueden requerir tratamiento. 

Estos son algunos de los tipos más comunes de hongos en la piel.

Pie de atleta

El pie de atleta es una erupción escamosa entre los dedos o en las plantas de los pies, a menudo acompañada de picor intenso. 

El tratamiento para el pie de atleta consiste en cremas y, en algunos casos donde los síntomas no ceden con las cremas, se utilizan medicamentos antimicóticos por vía oral

Hongos en las uñas

Esta infección hace que la uña se vea amarillenta y deformada, pudiendo llegar a transmitirse a otras uñas.

El tratamiento por lo general incluye la aplicación de un esmalte en la uña y, en ocasiones, también pastillas.

Este tipo de hongos tiene un tratamiento muy lento, que puede demorar hasta un año.

Candidiasis

El hongo Candida albicans es un tipo de hongo que normalmente se encuentra en la piel y en las mucosas del cuerpo.

Pero cuando su número crece de forma descontrolada debido a determinados factores, puede causar infecciones en diversas partes del cuerpo, como en la boca y en el área genital.

Los síntomas pueden variar dependiendo del área donde se encuentre.

El tratamiento de las infecciones por Candida suele incluir el uso de cremas o ungüentos antifúngicos tópicos, o medicamentos antifúngicos orales.

La tiña

La tiña es una erupción roja y circular que puede afectar a cualquier parte del cuerpo. 

La tiña suele tratarse con cremas y ungüentos y, en algunos casos, con comprimidos.

Síntomas y signos de los hongos en la piel

Los síntomas habituales de las infecciones cutáneas por hongos pueden incluir erupciones que pican, parches escamosos,erupciones ampollosas y cambios de color en la zona afectada. 

Otros signos a los que hay que prestar atención son la decoloración y la hinchazón de la zona infectada. 

Es importante prestar atención a cualquier cambio en la piel para poder consultar a un médico si es necesario.

Causas y factores de riesgo de los hongos en la piel

Los hongos en la piel están causados por diversos factores, algunos de los cuales pueden evitarse fácilmente. 

El contacto de la piel con una persona infectada es una de las principales causas, por lo que es importante una higiene adecuada y evitar el contacto estrecho con alguien que tenga una infección por hongos. 

Sudar profusamente también puede aumentar las posibilidades de desarrollar hongos en la piel, ya que el ambiente húmedo proporciona una atmósfera propicia para que los hongos se multipliquen. 

El debilitamiento del sistema inmunitario debido a enfermedades como el VIH o la diabetes también puede causar hongos en la piel, e incluso pequeñas abrasiones o cortes en la piel pueden servir de punto de entrada en nuestro organismo para que crezcan los hongos. 

Las personas que dependen en gran medida de los antibióticos y la quimioterapia también pueden estar en riesgo debido a sus bajos niveles de inmunidad. 

Sin embargo, es importante tener en cuenta que estas infecciones son completamente tratables cuando se gestionan adecuadamente con la medicación prescrita por un médico.

Diagnóstico y opciones de tratamiento de las infecciones por hongos en la piel

Las infecciones cutáneas por hongos están causadas por diversas especies de hongos y pueden afectar a distintas partes del cuerpo. 

El diagnóstico suele basarse en síntomas típicos como enrojecimiento y picor, seguidos de un examen microscópico para determinar la especie de hongo. 

El tratamiento suele consistir en cremas antimicóticas tópicas o medicamentos antimicóticos orales. 

En casos graves, pueden utilizarse antifúngicos orales en combinación con otros tratamientos biológicos como la fototerapia. 

Los pacientes deben consultar a un médico para obtener un plan de tratamiento individualizado que controle las causas subyacentes y aborde cualquier complicación adicional derivada de la infección.

Consejos de prevención para evitar contraer hongos en la piel

Las infecciones cutáneas por hongos pueden ser muy molestas y antiestéticas, por lo que es importante tomar ciertas medidas para prevenirlas. 

Mantener la piel limpia y seca es un primer paso importante. 

Llevar ropa holgada de algodón o tejidos transpirables permite que circule el aire, mientras que llevar sandalias en vestuarios y duchas públicas ayuda a evitar el pie de atleta. 

También hay que evitar compartir toallas, ropa, maquinillas de afeitar y otros objetos que entren en contacto con la piel. 

Si crees que puedes tener una infección por hongos, lo mejor es consultar a un médico para recibir el tratamiento adecuado y evitar que la afección empeore o se extienda a otras partes del cuerpo.

Cuándo buscar atención médica ante la sospecha de un caso de hongos en la piel

Si sospechas que puedes tener hongos en la piel, es importante que acudas inmediatamente al médico para que pueda diagnosticar y tratar la enfermedad. 

Los síntomas habituales de una infección por hongos en la piel son enrojecimiento, descamación, picor, ampollas y erupciones. 

Las infecciones fúngicas pueden propagarse rápidamente y, si no se tratan, pueden llegar a ser dolorosas o peligrosas. 

Para garantizar un diagnóstico preciso y obtener la atención adecuada para cualquier afección cutánea, lo mejor es concertar una cita con un médico. 

En algunos casos, puede ser suficiente una crema antimicótica de venta sin receta para ayudar a eliminar la infección en sus primeras fases. 

Sin embargo, muchas infecciones fúngicas requieren un tratamiento más agresivo, como medicamentos recetados o antifúngicos orales.