Existen distintos tipos de lesiones en el cuello uterino las cuales pueden ser causadas por múltiples condiciones. Las más frecuentes son las lesiones precancerosas que aparecen como resultado de la infección por VPH de alto riesgo. 

No obstante, también pueden aparecer lesiones provocadas por lesiones agudas o crónicas causadas por cuerpos extraños o infecciones bacterianas, fúngicas y virales.

Los tratamientos indicados para las lesiones del cuello uterino dependen estrictamente de lo que lo está originando en un principio.

Por esta razón, es especialmente importante el enfoque en tener chequeos ginecológicos regulares para poder tener un diagnóstico temprano.

Tipos de lesiones que pueden observarse en el cuello uterino

El cuello uterino puede tener diferentes tipos de lesiones, ya sean originadas por el VPH o por alguna inflamación. La manera de detectarlas es a través de los chequeos ginecológicos de rutina o en pruebas más específicas para determinar la naturaleza de estas lesiones.

Lesiones de cuello uterino con VPH inicial

Normalmente, cuando se habla de lesiones en cuello uterino se piensa directamente en aquellas ocasionadas por el virus del papiloma humano (VPH). Este virus puede ocasionar cambios en las células del epitelio del cuello uterino, originando lesiones precancerosas de distintos grados de severidad.

Si bien estas lesiones de cuello uterino con VPH inicial pueden volverse malignas, la mayoría de veces no se convierten en lesiones cancerosas debido a que estas tardan muchos años en evolucionar hasta un cáncer.

En ese sentido, los chequeos ginecológicos de rutina son cruciales para detectar las lesiones de cuello uterino con VPH inicial de forma temprana, cuando aún son tratables.

Lesiones de cuello uterino de origen inflamatorio

No obstante, también es posible observar lesiones en el cuello uterino de origen inflamatorio. 

Estas pueden ser producidas por infecciones bacterianas, fúngicas u otros virus. 

A su vez, también es posible observar lesiones inflamatorias ocasionadas por la presencia de cuerpos extraños, como DIU o restos de tampones retenidos.

Sin embargo, es posible que las lesiones en cuello uterino sean uno de los signos clínicos de un cáncer de cuello uterino.

Cómo se diagnostican las lesiones de cuello uterino

Los distintos tipos de lesiones que se presentan en el cuello del útero tienen distintos signos y síntomas que pueden ayudar al médico a diferenciarlas.

En el caso de lesiones causadas por infecciones bacterianas y fúngicas, las pacientes normalmente presentan prurito y secreciones vaginales con mal olor y aspecto. 

Por el contrario, es posible observar lesiones vesiculares en el caso de lesiones en el cuello uterino causadas por herpes.

Sin embargo, los métodos de diagnóstico más eficaces para las lesiones del cuello uterino son el Papanicolaou y la colposcopia. 

Esto se debe a que muchas veces las pacientes pueden no referir síntoma alguno.

Mediante el Papanicolau se extraen células del cuello uterino y son analizadas en el microscopio. 

No obstante, esto solo permite observar cambios en las células que pueden indicar que es necesario un examen más exhaustivo, como la colposcopia. 

Por lo tanto, el Papanicolaou no puede ser utilizado para emitir un diagnóstico definitivo.

Por el contrario, durante la colposcopia es posible observar zonas de lesiones en el cuello uterino y realizar biopsia para su posterior estudio y emisión de un diagnóstico.

Tratamientos disponibles para las lesiones de cuello uterino

El tratamiento para la lesión del cuello uterino depende de la condición que la haya originado en un principio.

Si el origen es una infección, es posible que la lesión desaparezca con antibióticos o antifúngicos.

A su vez, remover los objetos extraños que se encuentren ocasionando una reacción puede mejorar la condición.

En algunos casos, también es posible que el tratamiento indicado sea solamente la observación. 

Esto se debe a que muchas lesiones precancerosas producto del VPH desaparecen por sí solas sin necesidad de tratamiento.

No obstante, es posible tratar las lesiones de mayor severidad mediante su escisión quirúrgica. 

Esto se puede realizar mediante la conización cervical, láser o crioterapia.

Preguntas frecuentes acerca de lesiones en el cuello uterino

¿Son graves las lesiones en el cuello uterino?

En general, las lesiones cervicales pueden variar desde leves hasta graves, dependiendo de la causa subyacente y de la extensión y profundidad de la lesión.

Algunas lesiones leves pueden desaparecer sin tratamiento, mientras que las más graves pueden requerir intervenciones médicas como la cauterización, la crioterapia o incluso la extirpación quirúrgica del tejido afectado.

Es importante que las lesiones cervicales sean diagnosticadas y tratadas por un médico para prevenir posibles complicaciones a largo plazo, como la progresión del cáncer de cuello uterino.

¿Cuáles son los síntomas de las lesiones del cuello uterino?

Las lesiones en el cuello uterino pueden presentarse sin síntomas en sus etapas tempranas. 

Por eso, es importante realizar exámenes ginecológicos de forma regular, como el examen de Papanicolaou y la prueba del virus del papiloma humano (VPH), para detectar cualquier anormalidad en el cuello uterino.

Sin embargo, en algunos casos, las lesiones en el cuello uterino pueden presentar síntomas como:

• Sangrado vaginal anormal, como por ejemplo sangrado entre períodos menstruales o después de la menopausia.

• Dolor durante las relaciones sexuales.

• Flujo vaginal anormal: esto puede incluir un flujo inusualmente espeso, con un olor desagradable o de color diferente al normal.

• Dolor o presión en la pelvis.

Es importante tener en cuenta que estos síntomas pueden ser causados por otras afecciones y no necesariamente indican la presencia de lesiones en el cuello uterino.

Por lo tanto, si experimentas alguno de estos síntomas, debes hablar con tu médico para obtener un diagnóstico preciso.