Exponerse al sol durante mucho tiempo en el verano es un peligro latente, pues corres el riesgo de desarrollar en un futuro cáncer de piel. Por ello, es importante que tomes medidas al respecto. Una de ellas es usar un bloqueador solar. A continuación, te contamos cómo aplicártelo.

¿Qué es un bloqueador solar?

Es un producto que se unta en la piel, a fin de protegerse de los rayos ultravioleta (UV). Hay una gran variedad de bloqueadores solares que están disponibles en diversas formas, tales como lociones, cremas, ungüentos, geles, aerosoles, toallitas, entre otros.

Se debe considerar que el bloqueador no es útil para prolongar el tiempo que pasarás al sol, pues hay algunos rayos UV que sí pueden penetrarlo. En ese sentido, un bloqueador es parte de la protección para el cáncer de piel, pero es más efectivo no exponerse, es decir, ponerse a la sombra o usar ropa protectora.

¿Cómo seleccionar el bloqueador solar indicado?

Primero que nada debes leer la etiqueta. Te sugerimos que utilices bloqueadores con espectro amplio –es decir que protejan contra los rayos UVA y UVB- y con factor de protección solar (SPF) de mínimo 30.

El factor de protección solar (SPF) se refiere al nivel de protección que el bloqueador solar provee contra los rayos UVB. Mientras el SPF sea de mayor número, más protección a los rayos UVB brinda. Actualmente hay algunos que ofrecen SPF 100, lo cual significa que filtran aproximadamente 99% de los rayos UV. Lamentablemente, no hay ningún bloqueador solar que ofrezca una total protección.

En cuanto a ser resistentes al agua, solo los bloqueadores solares que han demostrado esta utilidad en estudios pueden llevar esa etiqueta. Asimismo tienen que indicar cuántos minutos dura la protección si se nada o suda.

Por último, es importante verificar la fecha de vencimiento. La mayoría de bloqueadores tiene una vigencia de por lo menos 2 a 3 años.

¿Cómo aplicarte el bloqueador solar?

Para empezar, te sugerimos que sigas las indicaciones de la etiqueta. Por lo general, se recomienda aplicar una buena cantidad en cara, orejas, cuello, brazos, y demás partes del cuerpo que no estén cubiertas por la ropa 10 ó 15 minutos antes de exponerte al sol. En caso uses repelente contra insectos o maquillaje, primero aplícate el bloqueador solar.

El estándar que debes echarte es 30 gramos –es decir, hasta llenar la palma de tu mano-, lo cual es suficiente para cubrir brazos, piernas, cuello y cara de un adulto 

Cada dos horas has de volver a aplicarte el bloqueador solar para mantener la protección como se debe. Toma en cuenta que estos pueden perder eficacia cuando te metes al agua o sudas y posteriormente te secas con una toalla. En esos casos debes aplicártelos con mayor frecuencia. También es necesario que uses bálsamos labiales con protección solar para tus labios.

Recuerda que todos somos guardianes de nuestra piel. Si quieres más consejos para cuidar tu piel, descarga aquí nuestra "Guía para prevenir el Cáncer de Piel".