Estás próxima a realizar tu chequeo anual preventivo de cáncer de mama, ¿y no sabes qué exámenes son los más adecuados para ti? Conoce un poco más sobre qué pruebas de detección debes utilizar de acuerdo a tu edad, y la densidad de tu mama. Lee la siguiente nota aquí.

Según The Global Cancer Observatory (GCO), señala que el cáncer de mama representa el 30% de todos los cánceres nuevos femeninos¹. Por ello, debes estar alerta a los signos y síntomas que presentes, porque muchas mujeres con cáncer de mama no notaron cambios al inicio. Es ahí donde juega un papel muy importante la prevención y atención inmediata que realices.

Exámenes de detección

Si todavía no sabes qué tipo de examen de detección realizarte, no temas. Aquí te mostraremos algunos de los métodos existentes, y lo mejor es que puedes hacerlo aún si eres bastante joven. Recuerda que antes de realizarte algún procedimiento debes acudir a tu médico para la consulta e indicación previa.

La Guía de tratamiento para pacientes con cáncer de seno de la National Comprehensive Cancer Network (NCCN), recomienda como primer paso acudir a una consulta médica, para la correspondiente exploración clínica anual². Por otro lado, las mujeres que ya están en los 40 años de edad a más, deben efectuarse una mamografía anual³.

• Mamografía

Es una de las herramientas más utilizadas y comunes para la detección del cáncer de mama. Consiste en sacar una radiografía a los senos, por lo cual es una técnica bastante segura y precisa con más de 40 años de uso⁴. Sin embargo, en el 15% de los casos no se mostrará un cáncer existente, a ello se le conoce como falso negativo.

Este tipo de examen no es recomendable para mujeres menores a los 35 años, ya que sus mamas suelen ser más densas y dificultan la visualización de los resultados. Así mismo, se ha comprobado que la mamografía reduce la mortalidad de las mujeres de 40 a 75 años de edad.

Tipos de mamografías:

Las mamografías que se realizan a las mujeres que no presentan síntomas de cáncer de mama, se les conoce como mamografía selectiva de detección. Por el contrario, los exámenes que se realizan para buscar signos de cáncer luego de haber encontrado un abultamiento, se llama mamografía de diagnóstico.

Pero también existe la mamografía convencional y digital, ¿cuál es la diferencia? Ambos tipos de mamografías usan rayos X para crear imágenes de la mama. Pero en la mamografía convencional, la imagen se registra directamente en la placa (película radiográfica) y, en la mamografía digital, la imagen electrónica se guarda en un archivo de computadora, generando una pequeña ventaja en relación a la visualización del producto.

Pero es importante señalar que un estudio Evaluativo de Imagenología con Mamografía Digital (DMIST) llegó a la siguiente conclusión⁵:

Es recomendable (antes que la mamografía convencional), la mamografía digital únicamente en mujeres que tienen menos de 50 años, que tienen tejidos mamarios muy densos, y son premenopáusicas.

• Ecografía

Esta técnica es utilizada para complementar algún otro análisis de detección. Con la ecografía podrás ver si lo hallado corresponde a un fibroadenoma, o si tiene líquido.

Además, ten en cuenta que si tienes las mamas densas éste tipo de detección es muy eficaz, de acuerdo con la Sociedad Americana de Enfermedades Mamarias (ASBD)⁶. Asimismo, un estudio reveló que las mujeres con tejido denso en más del 75% son propensas a desarrollar cáncer de seno, seis veces más que las mujeres sin densidades⁷.

Cual fuere tu caso, no olvides que los análisis, tratamientos y seguimientos de cáncer de mama siempre tienen que ir de la mano. Si buscas más información sobre cómo cuidarte, te recomendamos continuar leyendo nuestros consejos y recomendaciones en nuestra web especializada en cáncer de mama.