Todo empieza cuando ingerimos un alimento. Gracias a la masticación y las enzimas salivales, aquello que estamos consumiendo se hace suficientemente pequeño para pasar por el esófago y, posteriormente, entrar al estómago. Allí la comida es nuevamente trasformada, gracias al jugo gástrico, y pasa a los intestinos, donde los residuos no absorbidos se eliminan por las haces. 

Este proceso se llama tránsito intestinal. Lamentablemente, hay veces que sufre trastornos. Los más comunes son el estreñimiento –que es cuando nos demoramos más de la cuenta en hacer deposiciones-, la diarrea, que se caracteriza por incrementar la frecuencia de las heces, y la flatulencia, en la cual los gases aparecen con frecuencia. Para ello, hay ejercicios para activar el tránsito intestinal. 

Por lo general, se dice que para evitar un bloqueo del tránsito intestinal es fundamental comer de forma saludable, pero en esta ocasión nos enfocaremos en la importancia de practicar ejercicios y decirle no al sedentarismo.

Caminar 20 minutos

¿Has escuchado a un familiar o amigo proponer caminar después de comer para “facilitar la digestión”? Pues esto no es solo una tradición, sino también tiene una base científica. Diversos estudios confirman que dar una caminata, después de 15 minutos de haber comido, te ayuda a mejorar el tránsito intestinal y a controlar el nivel de azúcar en la sangre.

El tiempo que se recomienda caminar es entre 20 a 30 minutos y de una forma pausada y sin prisas. Así mismo, otro beneficio que obtendrás será quemar calorías.

Llevar las rodillas al pecho

Lo primero es acostarte boca arriba. Luego lleva tus piernas y dóblalas, pegándolas a tu pecho. Inmediatamente abrázalas y mantenerlas en esa posición durante 5 minutos, respirando de forma lenta.

Gracias a este ejercicio te liberarás de gases, debido a que presionas la zona intestinal e inhalas y exhalas profundamente. Quizás al comienzo te cueste, pero pronto te acostumbrarás.

Subir escaleras

Aunque a veces nos da flojera hacerlo, y optemos por el ascensor, lo cierto es que este ejercicio es muy bueno para el tránsito intestinal, pues el movimiento que hacemos activa tanto el intestino grueso como el delgado. 

Eso sí, debes tener en cuenta que el mejor momento para practicarlo es aproximadamente una hora después de haber comido, ya que si no podría interferir con el correcto proceso de la digestión.

Practicar yoga

Esta milenaria práctica cuenta con varios movimientos en los cuales uno estira su cuerpo físico y que también repercuten en beneficios en los órganos interiores. Te sugerimos la posición del puente, en la cual te echas en el suelo y doblas tus rodillas. Al mismo tiempo, tus brazos se mantienen junto a tu cuerpo y tus pies pegados al piso, mientras elevas tu cadera. De esta forma tu pecho obtiene un buen estiramiento y tus intestinos se ejercitan.

¿Cuál es el mejor momento para realizar estos ejercicios?

Si bien la idea es mejorar tu tránsito intestinal, no es recomendable practicar estos ejercicios (ni siquiera caminar) inmediatamente después de la ingesta de alimentos. Debes darle un tiempo a tu digestión a que haga su trabajo y después te pones manos a la obra. 

En el caso de caminar es suficiente esperar unos 15 minutos, mientras que en los demás ejercicios es bueno tomarse al menos una hora de diferencia entre la comida y los movimientos.

Te invitamos a probar estos ejercicios para ayudar a tu tránsito intestinal. Si te interesa seguir mejorando tu salud, no puedes perderte la quinta edición de nuestra revista Prevenvida, que podrás descargarte totalmente gratis aquí.