La radiografía de tórax, también llamada placa de tórax, es uno de los exámenes de imagenología más antiguos y más utilizados, incluso hoy en día, para observar el estado de la cavidad torácica, incluyendo los pulmones, el corazón y vasos sanguíneos.

Este tipo de radiografías pueden ser utilizadas en pacientes de todas las edades. 

No obstante, al realizarla en niños, es posible que sea necesario utilizar dispositivos especiales que ayuden a mantenerlos inmóviles.

A pesar de que los pacientes son irradiados al tomar una placa de tórax, las dosis de radiación han cambiado mucho a lo largo del tiempo. 

Actualmente, se utilizan dosis muy bajas que no suelen comprometer al paciente.

Qué es una radiografía de tórax

Una radiografía de tórax es un exámen imagenológico en el cual se utiliza un aparato de rayos X. 

Este emite rayos de radiación ionizante que atraviesan el cuerpo y se plasman en una placa física o de forma digital.

Los rayos X atraviesan los tejidos de diferentes formas. Los tejidos de mayor densidad, como los huesos, absorben dichos rayos. 

Por el contrario, los tejidos menos densos, como cavidades llenas de aire, los dejan pasar casi por completo.

Como resultado, se obtienen imágenes con distintos grados de opacidad que los médicos radiólogos pueden interpretar. 

Esto permite observar distintas condiciones de salud que puedan afectar al área torácica.

En qué momento se recomienda una radiografía de tórax y qué estructuras pueden observarse

Las radiografías de tórax son uno de los primeros exámenes que se realizan en los pacientes debido a su bajo costo, eficacia y rapidez. 

Se recomiendan principalmente en casos donde los pacientes presenten síntomas asociados a problemas o enfermedades pulmonares o cardíacos. 

Sin embargo, también suelen indicarse en pacientes que han sufrido accidentes o traumatismos.

Generalmente, este examen suele ser indicado en pacientes que presenten algunos de los siguientes síntomas:

• Dificultad para respirar 
• Tos que no para
• Dolor en el pecho
• Fiebre sin explicación 

En este examen es posible observar muchas estructuras, como lo son:

• Pulmones
• Corazón
• Vasos sanguíneos
• Costillas
• Columna vertebral 

A su vez, es posible observar distintas condiciones que afecten a cada una de estas estructuras. 

Algunas de las más frecuentes son:

• Infecciones, masas tumorales, enfisema, fibrosis quística en los pulmones.
• Tamaño y contorno del corazón, válvulas cardíacas o principales vasos sanguíneos.
• Fracturas de los huesos costillares o de la columna vertebral.

Cómo se realiza este exámen

Para tomar una radiografía de tórax no es necesario ningún tipo de preparación especial.

El paciente simplemente debe quitarse cualquier tipo de prendas y aparatología removible ya que estas pueden causar interferencias en las imágenes.

A su vez, se le pide al paciente que se desvista y se coloque una bata quirúrgica mientras se toma la radiografía.

La radiografía de tórax es un examen sumamente rápido y el resultado es casi inmediato. 

Puede tardar unos minutos mientras el personal determina que no es necesario repetir la imagen.

Este examen es indoloro aunque es posible que para algunos pacientes pueda ser incómodo permanecer totalmente inmóvil durante la toma de la radiografía.

Cuáles son las ventajas de la radiografía de tórax

La radiografía de tórax es una herramienta de diagnóstico comúnmente utilizada para evaluar la salud de los pulmones, el corazón y otras estructuras en el tórax.

Tiene varias ventajas, que incluyen:

Rápida y fácil de realizar: Las radiografías de tórax se realizan rápidamente y generalmente sólo requieren unos minutos. 

No hay necesidad de preparación previa del paciente y, por lo general, es un procedimiento no invasivo.

Bajo costo: Comparadas con otras modalidades de imagen, como la tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (IRM), las radiografías de tórax suelen ser más económicas.

Disponibilidad: Estos estudios son un método de diagnóstico ampliamente disponible en la mayoría de los centros de atención médica, lo que facilita su acceso para los pacientes y los médicos.

Útil para una variedad de condiciones: Las radiografías de tórax pueden detectar una amplia gama de afecciones, como neumonía, insuficiencia cardíaca, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), fracturas de costillas y otras anormalidades.

Menor exposición a la radiación: Aunque las radiografías implican exposición a la radiación ionizante, la cantidad de radiación utilizada en una radiografía de tórax es relativamente baja en comparación con otras modalidades de imagen, como la TC.

Detección temprana: Las radiografías de tórax pueden detectar anormalidades en etapas tempranas, lo que permite un diagnóstico y tratamiento oportunos.

Igualmente, pueden ser útiles para monitorear la respuesta al tratamiento en pacientes con afecciones pulmonares o cardíacas.

A pesar de estas ventajas, es importante recordar que las radiografías de tórax tienen limitaciones y no siempre son la opción de diagnóstico más apropiada para todas las situaciones. 

La elección del método de imagen más adecuado dependerá de la situación clínica y las necesidades específicas de cada paciente.

Preguntas frecuentes

¿Cuáles son las contraindicaciones y precauciones en la realización de una radiografía de tórax?

Las contraindicaciones y precauciones incluyen el embarazo y la lactancia, exposición repetida a radiación ionizante y alergias a medios de contraste.

¿Qué alternativas de diagnóstico existen para pacientes embarazadas o con alergias a medios de contraste?

Las alternativas de diagnóstico incluyen la ecografía y la resonancia magnética, ya que no utilizan radiación ionizante y pueden emplear medios de contraste no yodados.

¿Es perjudicial la radiación utilizada en una radiografía de tórax?

Aunque la radiación utilizada en la radiografía de tórax implica cierto riesgo, la dosis es relativamente baja. 

Los profesionales de la salud siguen el principio ALARA (As Low As Reasonably Achievable) para minimizar la exposición a la radiación.

¿Cuánto tiempo tarda en realizarse una radiografía de tórax?

El proceso de realización de una radiografía de tórax es rápido, generalmente toma sólo unos minutos. 

Sin embargo, el tiempo total puede variar dependiendo del posicionamiento y las necesidades del paciente.

¿Se necesita alguna preparación especial antes de realizar una radiografía de tórax?

Por lo general, no se requiere una preparación especial para una radiografía de tórax. 

Es posible que sea necesario retirar joyas o accesorios de metal que puedan interferir con la imagen. 

En algunos casos, si se utiliza un medio de contraste, podría haber instrucciones específicas previas al examen.